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  • Las mujeres supervivientes de violencia machista pueden recurrir a esta casa de acogida municipal como primer recurso de emergencia mientras encuentran alojamiento o se las ubica en algún centro de la Comunidad de Madrid.

Cartel de Violencia de GeneropImagen en alta resolución. Este enlace se abrirá mediante lightbox, puede haber un cambio de contextoCartel de Violencia de GeneropLa Casa de Emergencia Social de la Mujer de Móstoles ha atendido en lo que llevamos de año a 25 mujeres supervivientes de violencia machista con 18 menores a su cargo. Esta casa de acogida es un primer recurso de emergencia en el que se les ofrece alojamiento, comida, asesoría jurídica, atención psicológica y social.


La Alcaldesa de Móstoles, Noelia Posse, y la Concejala de Igualdad y Cooperación, Beatriz Benavides, han visitado hoy el centro para agradecer a sus trabajadoras la gran labor realizada durante la emergencia sanitaria de la COVID-19 y que siguen realizando a día de hoy para ofrecer una salida a muchas mujeres que sufren violencia machista y a sus hijas e hijos.


A día de hoy, 8 mujeres y 3 menores están acogidos en la Casa de Emergencia Social de la Mujer. El centro, atendido por una trabajadora social, una psicóloga, siete auxiliares, una abogada y personal de limpieza, tiene capacidad para 14 personas. El equipo de profesionales no solo se encarga de cubrir las necesidades básicas de mujeres y los menores y de orientarlas en el proceso jurídico, sino que también trabajan para ayudarlas en su recuperación y reincorporación a la vida diaria lejos de sus maltratadores.


Las supervivientes de violencia machista reciben apoyo y recursos para fortalecer su autoestima, reforzar su autonomía personal, sanar sus heridas físicas y emocionales y para romper los lazos de dependencia que muchas veces mantienen con sus maltratadores.


Se fomenta, además, su integración social y la búsqueda de alternativas de trabajo que les permitan salir de la espiral de maltrato en la que se han visto atrapadas. El objetivo es que puedan recuperar sus vidas de un modo sano y seguro para ellas y sus hijas e hijos.