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  • La responsable de las Comunidades Azules, Meera Karunananthan, ha hecho entrega al Ayuntamiento de una placa de reconocimiento por acciones en defensa del derecho humano al agua.

  • La alcaldesa, Noelia Posse, y el concejal de Medio Ambiente, Parques y Jardines, y Limpieza Viaria, Miguel Ángel Ortega, han recogido la distinción



defensa del derecho humano al agua 1Imagen en alta resolución. Este enlace se abrirá mediante lightbox, puede haber un cambio de contextodefensa del derecho humano al agua 1El Ayuntamiento de Móstoles ha recibido esta mañana una placa de reconocimiento por parte de las Comunidades Azules, convirtiéndose de este modo en la quinta ciudad española que pasa a formar parte del movimiento internacional en defensa del agua pública.


Este movimiento que nació en 2009 en Canadá, cuenta en la actualidad con más de 30 Comunidades Azules, entre las que se encuentra ahora también el municipio de Móstoles. En 2013, Berna (Suiza) se convirtió en la primera Comunidad Azul que se creaba fuera de las fronteras de Canadá. Le siguieron ciudades como París y Berlín, que se han convertido en las Comunidades Azules más grandes del mundo; y continúan los esfuerzos para ver nacer nuevas Comunidades Azules en Alemania, Grecia e Irlanda.


La Red de Comunidades Azules se ha extendido por España con proyectos en defensa de este Derecho Humano que ha desarrollado la Asociación Española de Operadores de Agua Pública (Aeopas) en Móstoles, Cádiz, Córdoba, Zaragoza, Medina Sidonia, Badajoz y Huelva.


En esta línea, el municipio ha recibido, a través de la alcaldesa Noelia Posse, y el concejal de Medio Ambiente, Parques y Jardines, y Limpieza Viaria, Miguel Ángel Ortega, el reconocimiento por las distintas campañas que ha promovido en defensa del derecho humano al agua, por promocionar el consumo de agua del grifo, por difundir hábitos de consumo responsable y por reducir progresivamente el plástico en aquellos edificios y espacios públicos de su competencia.


Meera Karunananthan, responsable de las Comunidades Azules, encargada de entregar la placa al Ayuntamiento, recordó que el compromiso de Móstoles, que ya ha adoptado resoluciones para reconocer el acceso al agua y al saneamiento como derechos humanos, es el de mantener sus servicios de agua y saneamiento públicos, así como fomentar la eliminación progresiva de venta de agua embotellada en instalaciones y eventos municipales y promover el agua del grifo en su lugar.


Por su parte, la alcaldesa se mostró orgullosa de la distinción recibida que coloca a Móstoles a la altura de ciudades como París o Berlín, en cuanto a políticas medioambientales de promoción del agua.


"El pasado mes de noviembre", recordó Posse, "aprobamos en el Pleno la Declaración Institucional en la que reconocíamos expresamente el derecho universal del acceso al agua, un derecho que lamentablemente aún no se cumple en muchas partes del mundo". Además, destacó, "nos hemos adherido a la campaña Progrifo, que ha dado como resultado un descenso del consumo de plástico en nuestra institución".


Todo este esfuerzo y trabajo de los ciudadanos e instituciones ha sido reconocido hoy y, por ello, aseguró la regidora, "muestro nuestro orgullo, el orgullo de una ciudad viva que con actitud y compromiso ha llegado en tan poco tiempo a recibir este reconocimiento internacional, fruto de la colaboración y el entendimiento".


Según Miguel Angel Ortega, concejal de Medio Ambiente, las campañas puestas en marcha en el municipio son "los primeros pasos que damos para defender las reservas de agua en nuestro país, como un bien absolutamente necesario".


Aseguró, a su vez, que debemos estar atentos, ya que "en nuestra región ha habido serios intentos de privatización del agua pública que consumimos en nuestras ciudades, como la privatización del Canal Isabel II, intento que no ha desaparecido por lo que debemos seguir vigilantes". Finalmente, también llamó la atención acerca de la preocupante situación de las reservas de agua disponible en nuestro país, en torno a un 40%".