El Ayuntamiento de Móstoles organiza varios actos para conmemorar a las víctimas del Holocausto, en el Museo de la Ciudad
- La ciudadanía interesada en asistir puede retirar, a partir de mañana, las entradas en el propio museo, sin coste alguno, en horario de apertura del mismo.
Coincidiendo con el Aniversario del Holocausto, el Ayuntamiento de Móstoles va a desarrollar una serie de actos en el Museo de la Ciudad, que contarán con la participación del alcalde, David Lucas, del concejal de Cultura y Bienestar Social, Gabriel Ortega, y del vicepresidente de la Comunidad Judía de Madrid, Moisés Israel. Además, la ciudadanía interesada en asistir puede retirar, a partir de mañana, las entradas en el propio museo, sin coste alguno.
Entre las actividades hay una conferencia, conciertos y una lectura de fragmentos del Diario de Ana Frank para conmemorar a las víctimas del Holocausto.
Programación del miércoles 25
Lectura de párrafos del `Diario de Ana Frank´
A partir de las 17.30 horas se va a desarrollar una lectura de párrafos del `Diario de Ana Frank´, interpretada por parte de la Asociación Española de Amigos de la Poesía (ASEAPO), y posteriormente, a las 19.30 horas, el historiador Francisco Javier Bernad Morales impartirá la conferencia, `Responsabilidad ante el Holocausto´.
Esta autora nace el 12 de junio de 1929 en la ciudad alemana de Fráncfort del Meno. Su vida y la de su familia transcurrieron con normalidad hasta que la crisis económica, el surgimiento de Hitler y el creciente sentimiento antisemita en la sociedad ponen fin a su tranquilidad. Su padre, Otto Frank y su madre, Edith, deciden – como muchos otros judíos – dejar Alemania.
Durante le Segunda Guerra Mundial, tuvieron que esconderse para escapar a la persecución de los nazis. Junto con otras siete personas permanecieron escondidos en la «casa de atrás» del edificio situado en el canal Prinsengracht n° 263, en Ámsterdam. Después de más de dos años de haber estado ocultos, los escondidos son descubiertos y deportados a campos de concentración. De los ocho escondidos, solo el padre de Ana, Otto Frank, sobrevive a la guerra.
Poco antes de tener que esconderse, Ana recibe un diario personal como regalo de cumpleaños, en el que comienza inmediatamente a escribir. Durante el periodo en que estuvo escondida, Ana escribe sobre lo que ocurre en la Casa de Atrás y sobre sí misma. Ana y su hermana Margot murieron por una epidemia de tifus semanas antes de su liberación por tropas británicas.
Conferencia `Responsabilidad ante el Holocausto´
El mismo miércoles, a partir de las 18:30 h, el historiador Francisco Javier Bernad Morales impartirá la conferencia `Responsabilidad ante el Holocausto´. La idea es, a través del testimonio de los supervivientes, no solo indagar en las responsabilidades individuales y colectivas que condujeron al intento de exterminio de los judíos, sino también en nuestra propia responsabilidad como guardianes de la memoria, a fin de que algo así no vuelva a suceder.
A continuación, sobre las 19:30 h, lLos profesores del Conservatorio de Grado Profesional Rodolfo Halffter, Eduardo del Río, violoncelo, y David Arenas, clarinete, podrán fin a los distintos actos programados este día con un concierto donde interpretarán obras compuestas por músicos judíos para que la tristeza y la desesperación no llegará a calar en los guetos donde les habían confinados.
Programación jueves 26
El cantautor Pedro Sáez Ortega, acompañado por María José Álvarez, ofrecerá el concierto `Cantar después de Auschwitz´ a partir de las 19.30 h.
En este concierto se preguntarán ¿se puede cantar –o pintar, o escribir, o creer, o incluso pensar–, después del Holocausto? Es muy difícil responder a esta pregunta, que afecta a la conciencia de Occidente desde que se produjo el genocidio nazi durante la Segunda Guerra Mundial, y que supuso el asesinato de millones de seres humanos, judíos, gitanos y otras minorías étnicas y sociales, en nombre de una aberrante ideología totalitaria. Este programa de odio racista requirió la construcción de una maquinaria, de una auténtica industria del exterminio masivo, al servicio de la cual trabajaron muchos miles, de manera activa y entusiasta o de forma pasiva y forzada por las circunstancias, lo que todavía desasosiega aún más. Hay algunos que defienden el silencio, de acuerdo con las palabras de Theodor W. Adorno: "Después de Auschwitz no puede haber poesía".
Este concierto está más en consonancia con la afirmación de Irme Kertesz: "Después de Auschwitz sólo queda la poesía, sólo queda resistir con palabras ciertas".Así, nos atrevemos a utilizar el lenguaje poético y musical de las canciones para hacer aún más visible el sentido profundo de ese terrible acontecimiento, para rescatar del olvido o de la indiferencia a sus víctimas y para conjurar los signos y los gestos que anuncian en el presente los discursos complacientes o abiertamente legitimadores –aunque cambien de objetivo o se maquillen con otros razonamientos más "suaves" –, de aquella vergüenza.
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