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* Se presentarán del 5 al 20 de septiembre en las Juntas Municipales de Distrito, y en la Oficina de Atención al Ciudadano del PAU 4


* En este curso podrán participar aquellas familias cuya renta anual no supere las 33.838€ (el curso pasado el umbral era de 29.820 €), lo que permitirá llegar a un mayor número de familias


El Ayuntamiento de Móstoles, a través de la Concejalía de Educación, abre este miércoles 5 de septiembre el plazo de entrega de solicitudes para aquellas familias que deseen pedir las ayudas para la adquisición de libros de texto y material escolar.


ayuda familias libros 2018pImagen en alta resolución. Este enlace se abrirá mediante lightbox, puede haber un cambio de contextoayuda familias libros 2018pEl Ayuntamiento destinará un total de 425.000 euros a este capítulo, que ahonda en la apuesta del actual Gobierno Municipal por la educación pública y el apoyo a la escolarización de los niños y niñas de las familias con menos recursos.


Las ayudas van dirigidas a alumnos empadronados en Móstoles y escolarizados en colegios de Educación Infantil y Primaria e Institutos de Educación Secundaria Obligatoria y Formación Profesional Básica. Las solicitudes se presentarán en el periodo comprendido entre el 5 y el 20 de septiembre de 2018 (ambos inclusive) en las Juntas Municipales de Distrito, y en la Oficina de Atención al Ciudadano del PAU 4, en horario de 9:00 a 20:00 horas.


En esta Convocatoria se amplía, como novedad, el umbral de renta máxima, pudiendo participar en la misma las familias cuyo renta anual no supere los 33.838€ (4,5 veces el IPREM). El curso pasado el umbral era de 29.820 €., de forma que este año, se conseguirá llegar a un mayor número de familias.


Destaca también, como novedad para este curso, que los beneficiarios del programa de ayudas han de entregar en el centro escolar donde está matriculado el alumno, tres libros, que el centro determine, y que hayan sido adquiridos con la ayudas recibidas en cursos anteriores.


El objetivo es incrementar el banco de libros que los centros docentes destinan al préstamo de libros de texto, de manera que cada nuevo curso sean más las familias beneficiadas; concienciar al alumnado de la importancia del cuidado de los libros y material escolar para un mejor aprovechamiento de los recursos, tanto materiales como económicos; y finalmente racionalizar el gasto público.