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Con este simbólico gesto, limitado por las restricciones para evitar la expansión de la COVID-19, el Ayuntamiento de Móstoles ha querido visibilizar su compromiso de lucha contra la violencia machista. En lo que llevamos de año 41 mujeres han sido asesinadas en España por sus parejas o exparejas, solo el 15% habían presentado denuncia.


noticianoticiaUn rotundo silencio en homenaje a todas las mujeres asesinadas por sus parejas o exparejas en España, por todas y cada una de las vidas truncadas por la violencia machista, ha inundado hoy la plaza de España de Móstoles en un gesto de respeto hacia las víctimas y de repulsa contra esta lacra social. En lo que llevamos de año 41 mujeres han sido asesinadas en España dejando a 23 niños huérfanos. Desde que se iniciaron los registros en 2003, son ya 1.074 las mujeres asesinadas.

Con este simbólico minuto de silencio, en el Día Internacional por la Eliminación de la Violencia contra las Mujeres, el Ayuntamiento de Móstoles, ha querido visibilizar públicamente su compromiso para erradicar cualquier tipo de violencia contra las mujeres solo por el hecho de serlo.

El acto, en formato reducido dadas las restricciones establecidas para evitar la expansión de la COVID-19, ha finalizado con un emotivo aplauso. Ha estado presidido por la Alcaldesa, Noelia Posse, acompañada por la Concejala de Igualdad, Beatriz Benavides, el portavoz del PSOE, Álex Martín, la portavoz de Podemos, Mónica Monterreal, la portavoz del PP, Mirina Cortés, el Portavoz de Ciudadanos, José Antonio Luelmo, y la Concejala de Más Madrid- Ganar Móstoles, Susana García.

Durante toda esta semana, el balcón del Ayuntamiento lucirá una pancarta en señal de rechazo contra la violencia machista. Un grave problema social ante el que Móstoles no puede mirar hacia otro lado. Solo el 15% de las mujeres asesinadas este año habían presentado denuncia. Por eso, el Gobierno Local apela a todas las vecinas y vecinos de la ciudad, para que, si conocen a alguna mujer en situación de riesgo, denuncien. Solo así podremos activar todos los mecanismos disponibles para ayudarlas a salir de la espiral de violencia en la que se ven envueltas ellas y sus hijas e hijos.